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Descripción de la tarea

Portada de la tarea

Imagen modificada de M. Verch en Flickr. Licencia CC

Desarrollo

Actividad 1

Lee los siguientes textos y resuelve las cuestiones que se te plantean más abajo:

TEXTO 1

Descúbrese SEGISMUNDO con una cadena y la luz vestido de pieles

SEGISMUNDO:

¡Ay mísero de mí, y ay, infelice!
Apurar, cielos, pretendo,
ya que me tratáis así
qué delito cometí
contra vosotros naciendo;
aunque si nací, ya entiendo
qué delito he cometido.
Bastante causa ha tenido
vuestra justicia y rigor;
pues el delito mayor
del hombre es haber nacido.

Sólo quisiera saber
para apurar mis desvelos
(dejando a una parte, cielos,
el delito de nacer),
qué más os pude ofender
para castigarme más.
¿No nacieron los demás?
Pues si los demás nacieron,
¿qué privilegios tuvieron
qué yo no gocé jamás?

Nace el ave, y con las galas
que le dan belleza suma,
apenas es flor de pluma
o ramillete con alas,
cuando las etéreas salas
corta con velocidad,
negándose a la piedad
del nido que deja en calma;
¿y teniendo yo más alma,
tengo menos libertad?

Nace el bruto, y con la piel
que dibujan manchas bellas,
apenas signo es de estrellas
(gracias al docto pincel),
cuando, atrevida y crüel
la humana necesidad
le enseña a tener crueldad,
monstruo de su laberinto;
¿y yo, con mejor instinto,
tengo menos libertad? [...]

La vida es sueño, Calderón de la Barca.

 TEXTO 2

La desesperación

Me gusta ver el cielo
con negros nubarrones
y oír los aquilones
horrísonos bramar,
me gusta ver la noche
sin luna y sin estrellas,
y sólo las centellas
la tierra iluminar.

Me agrada un cementerio
de muertos bien relleno,
manando sangre y cieno
que impida el respirar;
y allí un sepulturero
de tétrica mirada
con mano despiadada
los cráneos machacar.

Me alegra ver la bomba
caer mansa del cielo,
inmóvil en el suelo,
sin mecha al parecer,
y luego embravecida
que estalla y que se agite
y rayos mil vomite
y muertos por doquier.

Que el trueno me despierte
con su ronco estampido,
y al mundo adormecido
le haga estremecer;
que rayos cada instante
caigan sobre él sin cuento,
que se hunda el firmamento
me agrada mucho ver.

La llama de un incendio
que corra devorando
escombros apilando
quisiera yo encender;
tostarse allí un anciano,
volverse todo tea,
oír como vocea,
¡qué gusto!, ¡qué placer! [...]

Atribuido a José de Espronceda.

TEXTO 3

Busco en los hombres aquel amor de la patria que hallo tan celebrado en los libros; quiero decir aquel amor justo, debido, noble, virtuoso, y no le encuentro. En unos no veo algún afecto a la patria; en otros sólo veo un afecto delincuente, que con voz vulgarizada se llama pasión nacional.

No niego que revolviendo las historias se hallan a cada paso millares de víctimas sacrificadas a este ídolo. ¿Qué guerra se emprendió sin este especioso pretexto? ¿Qué campaña se ve bañada de sangre, a cuyos cadáveres no pusiese la posteridad la honrosa inscripción general de que perdieron la vida por la patria? Mas si examinamos las cosas por adentro, hallaremos que el mundo vive muy engañado en el concepto que hace que tenga tantos y tan finos devotos esta deidad imaginaria. Contemplemos puesta en armas cualquiera república sobre el empeño de una justa defensa, y vamos viendo a la luz de la razón qué impulso anima aquellos corazones a exponer sus vidas. Entre los particulares algunos se alistan por el estipendio y por el despojo; otros por mejorar de fortuna, ganando algún honor nuevo en la milicia, y los más por obediencia y temor al príncipe o al caudillo. Al que manda las armas le insta su interés y su gloria. El príncipe o magistrado, sobre estar distante del riesgo, obra no por mantener la república, sí por conservar la dominación. Ponme que todos esos sean más interesados en retirarse a sus casas que en defender los muros; verás cómo no quedan diez hombres en las almenas.

Aun aquellas proezas que inmortalizó la fama como últimos esfuerzos del celo por el bien público acaso fueron más hijas de la ambición de gloria que del amor de la patria. Pienso que si no hubiese testigos que pasasen la noticia a la posteridad, ni Curcio se hubiera precipitado en la sima, ni Marco Atilio Régulo se hubiera metido a morir en la jaula de hierro, ni los dos hermanos Filenos, sepultándose vivos, hubieran extendido los términos de Cartago. Fue muy poderoso en el gentilismo el hechizo de la fama póstuma. También puede ser que algunos se arrojasen a la muerte, no tanto por el logro de la fama cuanto por la loca vanidad de verse admirados y aplaudidos unos pocos instantes de vida, de que nos da Luciano un ilustre ejemplo en la voluntaria muerte del filósofo Peregrino.

Teatro crítico universal, Benito Jerónimo Feijoó.

1.1. Haz un breve resumen del contenido de cada texto (en no más de cinco líneas).

1.2. ¿A qué género literario responde cada uno de los textos (narrativa, poesía o teatro)?  Justifica tu respuesta con argumentos con los que expliques la pertenencia de cada texto a su género.

1.3. ¿En qué movimiento literario puede enclavarse cada uno de estos textos (Barroco, Neoclasicismo, Romanticismo, Posromanticismo)? Responde a esta pregunta citando aquellos rasgos propios de estos movimientos que estén presentes en los textos y ejemplificando siempre que puedas tu contestación.

Actividad 2

Haz clic en la imagen que aparece más abajo y elige uno (uno solo) de los seis poemas de Rosalía de Castro que se te ofrecen. Después, responde a la pregunta que se te plantea más abajo.

Haz clic en la imagen
(haz clic en la imagen para descargarte los poemas)

2.1. Con el poema que has elegido (recuerda, solo uno de los seis), debes hacer un análisis formal del texto. Indica el esquema métrico del texto, la medida de sus versos, la rima y, si la hubiera, la estrofa empleada en el poema. Señala, asimismo, al menos tres figuras retóricas presentes en el texto.

2.2. Rosalía de Castro es, junto a Gustavo Adolfo Bécquer, el mejor ejemplo de poesía posromántica en nuestro país. Destaca en el poema que has elegido los rasgos de este movimiento que están presentes en él.

Actividad 3

3.1. Toma una palabra del poema que has elegido antes e inventa, con ella, una oración simple que tenga dos complementos verbales (complemento directo, indirecto, circunstancial, de régimen, atributo...). Después, haz un análisis sintáctico completo y redactado de ella. 

Aquí tienes un ejemplo:

Palabra elegida del poema:

beso

Oración simple:

Mi prima del pueblo ha dado un beso a su pareja.

Análisis

Se trata de una oración simple formada por un sintagma nominal sujeto y un sintagma verbal predicado.

  • El sujeto está formado por un sintagma nominal constituido por un determinante ("Mi"), un núcleo ("prima") y un S.prep. que actúa como complemento del nombre. Este último, a su vez, contiene un enlace ("de") y un SN que funciona como término ("el pueblo"). Este sintagma nominal consta de un determinante ("el") y un núcleo ("pueblo").
  • El predicado está constituido por un núcleo ("ha dado") y dos complementos: un SN/CD ("un beso") y un S.prep./CI ("a su pareja"). El primero de ellos consta de un determinante ("un") y un núcleo ("beso"). El segundo, de un enlace ("a") y un término (el SN "su pareja", formado a su vez por un determinante "su" y un núcleo "pareja").

La oración es una frase personal, predicativa, activa, transitiva y enunciativa afirmativa.

Modo de envío

Para responder a todas las cuestiones que plantea la tarea, puedes servirte de la siguiente plantilla.