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ABP en proyectos de investigación

ABP en proyectos de investigación: Jóvenes con Investigadores

El aprendizaje por descubrimiento y sus detractores

El ciclo del proyecto en ABP coincide con la lógica del aprendizaje basado en problemas o el aprendizaje basado en la indagación. Una visión dogmática del método heurístico en educación, después de la revolución tecnológica, había conducido al error de excluir la intervención de los adultos en el proceso de aprendizaje. Durante algunos años, los primeros medios sociales se hicieron eco del experimento de Sugata Mitra en 1999: "el agujero en la pared". Un grupo de niños pobres en un barrio marginal de Nueva Delhi habían aprendido a manejar una computadora sin ayuda adulta. 

Sin embargo, no era esa la intención de Jerome Bruner, psicólogo cognitivo, cuando recomendó que el aprendizaje guiado dejara espacio para la curiosidad y el descubrimiento por parte de la infancia (The Process of Education, 1960, 1977; "The Act of Discovery", 1961). Actualmente se le conoce más por las quejas de sus detractores, como Ausubel, quien defiende la eficacia del aprendizaje por recepción, aunque coincide con Bruner en la inutilidad del esfuerzo memorístico a corto plazo (Educational Psychology: A Cognitive View, 1968). De otro modo, lo que Bruner defiende en su artículo "El acto del descubrimiento" es que el aprendizaje debe ser comprensivo para que llegue a establecer una red de conceptos en la memoria a largo plazo.

Más allá de esa polémica entre paradigmas científicos sobre el dominio de la memoria, Bruner contribuyó a cambiar el sentido de la instrucción hasta convertirla en una adaptación de la enseñanza a la psicología del desarrollo infantil (Toward a Theory of Instruction, 1966). Argumentó en favor de la colaboración entre las ciencias y las humanidades, puesto que tanto la una como la otra utilizan narraciones para dar sentido al conocimiento en el marco de una cultura. El terreno común a ambas es la psicología popular (Acts of Meaning, 1990). Demostró que la ciencia necesitaba de la imaginación para construir mundos posibles al formular sus hipótesis, antes de llegar a demostrarlas empíricamente (Realidad mental y mundos posibles, 1986). 

Es curioso que Bruner, a pesar de su enorme esfuerzo por defender la importancia de la educación (La educación, puerta de la cultura, 1996), haya sido eclipsado por una sola obra de Ausubel, a quien todo el mundo cita como autor de la teoría del aprendizaje significativo. No obstante, la hipótesis de Ausubel es mucho menos comprensiva que la de Bruner, con el fin de explicar, precisamente, que la enseñanza debe apoyarse en los conocimientos previos del alumnado. De hecho, cuando definimos una situación de aprendizaje, nos referimos a todos los factores culturales que explican la psicología del desarrollo infantil.

En buena medida, las ciencias avanzan por medio del conflicto entre proyectos de investigación científica (cf. Lakatos) y paradigmas en pugna por configurar el pensamiento (cf. Kuhn). Lo estamos experimentando, a nuestro pesar, por la tardanza de la economía en asumir los descubrimientos probados de las ciencias naturales sobre el calentamiento global como principal causa del cambio climático.

¿Cómo puede contribuir la educación a que el método científico sea asumido como medida del acierto y el error en cuestiones de tanta relevancia para nuestras vidas y para las generaciones futuras? ¿Hay otro modo de hacerlo que no sea por descubrimiento, a la vez que por instrucción?

Cómo enseñar el método científico

De acuerdo con la investigación pedagógica (cf. Lafuente Martínez, 2021), confirmamos que el potencial del ABP se multiplica cuando incluye como elemento crucial la instrucción directa en la fase de exploración, siempre que el alumnado se haga cargo de elaborar el producto final y lograr impacto público en un evento de difusión.

La razón es muy simple: no hay rol social que valga sin una dimensión performativa. La filosofía de la ciencia, desde el falsacionismo de Popper (La lógica de la investigación científica, 1934) y Lakatos (Pruebas y refutaciones, 1976) hasta la teoría de las revoluciones científicas de Kuhn (La estructura de las revoluciones científicas, 2012, 4.ª ed.), ha incorporado el concepto de acción al discurso científico. No existe la ciencia sin actuación, ni hipótesis que se defienda por sí sola, sin argumentos racionales y sin fuerza argumentativa, además de las meras evidencias positivas. Por tal motivo se hace imprescindible garantizar las condiciones óptimas para la comunicación científica. No hay ni siquiera posibilidad de falsar una hipótesis, alega Popper (La sociedad abierta y sus enemigos, 1945), si no es en el marco de una sociedad abierta que dificulte la impostura de una mentalidad dogmática. 

¿Se puede aprender el método científico por medio de un proyecto ABP + STEAM? Quizá se deba, si lo que se pretende es que el alumnado se haga protagonista y responsable de su aprendizaje de forma autónoma. Tal es el caso del programa Jóvenes con Investigadores (JconI).

Programa “Jóvenes con Investigadores” (JconI)

En 4.º ESO y 1.º Bachillerato, organizado por por una alianza de centros de secundaria en Andalucía Occidental, aunque hay otros proyectos afines en Málaga y Granada. 

Cada convocatoria anual de Jóvenes con Investigadores se compone de una oferta de proyectos para iniciar en la investigación a jóvenes equipos intercentros de 4.º ESO y 1.º Bachillerato, a partir de propuestas de las Universidades del entorno.

El ciclo del proyecto reproduce el método científico, incluyendo su dimensión performativa:

  • Elegir entre un menú de varios retos, planteados por la comunidad científica universitaria
  • Formar equipo con un grupo de estudiantes, investigadores y docentes durante cuatro seminarios intensivos a lo largo del curso, desde enero a marzo
    • Recibir una instrucción directa por parte del equipo universitario de investigación, complementada por la docencia de ESO y Bachillerato, sin lo cual sería imposible afrontar el reto
    • Organizar un proceso de experimentación autónoma para falsar la hipótesis: recoger y ordenar los datos, interpretarlos de forma guiada y reformular la hipótesis a partir de los datos empíricos

Cada equipo elabora una colección de productos finales para participar en un Congreso de Jóvenes con Investigadores: memoria final, póster, presentación digital y oral, abstract.

De hecho, varios institutos: el IES Ítaca de Tomares (Sevilla) y el IES Martín Rivero de Ronda (Málaga) han incorporado una asignatura optativa en 1.º Bachillerato, de libre configuración por el centro, que se dedica al desarrollo de los proyectos.

Treballs de recerca

JconI es un modelo a escala de los Treballs de recerca en el Bachillerato catalán, que engloba los dos cursos de educación media-superior y sirve de contrapeso a la tradicional prueba de selectividad. 
Merece especial atención el Portal Paula de la UB, por sus propuestas y ayudas a la investigación en los ODS, los derechos humanos y la ciudadanía global. Gracias a sus espacios de formación, participación y difusión, los trabajos de investigación se convierten en proyectos auténticos. Su principal motor consiste en realizar un servicio:

Etapas de la investigación en el treball de recerca
Portal Paula. Etapas de la investigación en el treball de recerca (CC BY-NC-SA)

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