Guía para el debate
1. Héroes o antihéroes.
De acuerdo con el filósofo Hegel y con el romanticismo burgués, los auténticos héroes (y heroínas) son las personas que conquistan su libertad aunque tengan que arriesgar su vida para conseguirlo. Habría que completarlo diciendo que mayor heroísmo habrá en quien lucha por la libertad de muchas personas, además de la propia. Tal sería la perspectiva socialista, pero también religiosa (judía, cristiana y musulmana), sobre el asunto.
En la sección sobre las novelas del Siglo de Oro nos hemos referido a otros héroes masculinos, además de Don Quijote, aunque tienen mucho de antihéroes: uno por pícaro (Ginés de Pasamonte) y otro por bandolero (Roque Guinart).
De distinta manera, uno por medio de la burla y el engaño, el otro por hacer demostración de su heroísmo (según la visión de Don Quijote), ambos consiguen el premio de la libertad, aun cuando sea al precio de una vida clandestina, solo sacada a la luz por el "historiador" Cide Hamete Benengeli: ese cronista árabigo manchego, que no se pone de parte de nadie, sino de los valores humanos universales; y también por el narrador que da cuerpo escrito a la voz de Cervantes.
Muy bien, pero ¿qué pasa con las mujeres del Quijote?
2. Auténticos villanos.
En cualquier época, los hombres que maltratan o denigran a las mujeres eran considerados villanos, pero en ninguna más que en la actualidad. Parece que Cervantes se adelanta a su tiempo cuando pretende corregir esas conductas, aunque a veces el corregido sea el propio Don Quijote.
Tenemos ya algunos candidatos para villano: sobre todo, el aristócrata don Fernando, aun cuando terminase redimido al final de la Primera parte de la novela.
3. Mujeres perseguidas.
En aquellos mundos o mundillos, pasados o actuales, reales o ficticios, donde la ortodoxia se identifica con el interés particular de los varones, las autoridades toleran acciones y obras que refuerzan el poder masculino, e incluso las convierten en leyes civiles y en mandatos religiosos. Se hacen pasar por normales y ortodoxas las más elementales formas de desigualdad y las muestras de desprecio contra las mujeres.
Es notable que varios personajes femeninos de la novela tengan que afrontar distintas formas de villanía: la pastora Marcela, la morisca Ana Félix, las mujeres jóvenes a quienes no se permite amar o elegir pareja. Además de los casos conocidos, podríamos añadir otro personaje: la dueña Dolorida, quien ruega a Don Quijote que defienda a su hija, embarazada de un hombre que le prometió casarse con ella, pero se ha desentendido de los efectos.
4. Mujeres heroínas.
En cualquier caso, parece que Cervantes también reconoce la heroicidad de algunos personajes femeninos, que luchan por conquistar su libertad frente al villano y frente a la villanía de la autoridad patriarcal, por muy autoridad que sea.
¿Cuáles piensas que son los límites entre heroísmo, heterodoxia y villanía?
1. Pongámonos en un ambiente donde las leyes o las costumbres justifiquen la desigualdad entre etnias, grupos o clases sociales, mujeres y hombres. ¿Cómo se tratará a las personas "heterodoxas", que desafían el orden instituido? ¿Como a héroes o como a villanos? ¿Por qué?
2. Sin embargo, en las novelas se proponen héroes y heroínas que transgreden el orden impuesto. ¿Por qué crees que ocurría (y sigue ocurriendo) de ese modo?
3. Los personajes de Ginés de Pasamonte y Roque Guinart ¿cómo serían considerados en nuestra época? ¿Héroes o villanos? ¿Por qué?
4. ¿Quién se comporta como un auténtico villano en la novela de Cervantes? ¿Cómo trata a las mujeres: Dorotea y Luscinda?
5. ¿Quiénes son las heroínas del Quijote?
6. Piensa en personajes de nuestra época, tanto en la realidad como en la ficción (películas, series, etc.), que sean héroes y heroínas reconocidos por el público. ¿En qué medida son heterodoxos, también, con respecto a la sociedad actual? ¿Por qué?