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Según Ricardo Méndez, tanto los medios de comunicación como la bibliografía especializada en el ámbito de las relaciones internacionales y la geopolítica, señalan que los múltiples conflictos que surgen a comienzos del siglo XXI en todo el mundo tienen como eje principal la apropiación, gestión y uso de los recursos naturales estratégicos.
Nuevos paradigmas frente a los recursos naturales
Desde el final de la guerra fría, los profundos cambios que han tenido lugar las relaciones internacionales y el estudio de las mismas, incluyen un cierto proceso de ambientalización de la geopolítica, con varias dimensiones complementarias.
Una forma de estudiar este proceso de ambientalización internacional, según lo propuesto por Méndez, es pensar que la escasez y desigualdad de los recursos naturales son los factores principales para explicar las tensiones y conflictos que suceden en diferentes partes del mundo, así como las estrategias de poder que despliegan los actores geopolíticos.
¿Cómo debemos analizar estos conflictos?
Para entender esta geopolítica de los recursos naturales, es importante destacar las múltiples escalas que intervienen en los conflictos y cómo se relacionan unas con otras:
- A escala mundial, la cuestión central es la constante profundización en el secular desequilibrio entre el consumo de los recursos naturales que realizan los países desarrollados en comparación con el resto del mundo, potenciando las tensiones Norte-Sur dentro del sistema mundial.
- A escala regional, algunos países del mundo se ven hoy afectados por conflictos directamente relacionados con sus recursos naturales. Por un lado, encontramos países con recursos naturales estratégicos para la economía mundial (como el litio) donde convergen intereses tanto de actores internos como externos en materia de su protección o explotación. Por el otro, la escasez o explotación de los recursos hídricos, o la presión sobre los suelos en materia de densidad de población e intensidad en los usos, puede derivar a riesgos de inestabilidad.
- A escala estatal, los estados que son afectados por problemas como la pobreza y la desigualdad (entre otros), cimentado por un reparto desigual de la propiedad de la tierra o del agua provocan conflictos y el surgimiento de movimientos populares como los “Sin Tierra” en Brasil.
- Finalmente, en el plano local, luego de la oleada neoliberal de los años ochenta y apoyada por organismos financieros internacionales, se generó un avance importante en la mercantilización y privatización de algunos servicios básicos como también de recursos naturales tradicionalmente públicos como el agua.