Cuando examino mi existencia desde dentro de mi conciencia...
..., me veo como un centro de significado y propósito: todo tiene sentido porque tengo planes de futuro, anhelos por cumplir, disfruto con mis amigos y lleno mi tiempo con aficiones o incluso aburrimiento.
Pero si me paro a pensar en mi situación desde fuera y me veo en perspectiva, caigo en la cuenta de que mi destino es el mismo que el de todos los seres humanos que me precedieron sobre este planeta: vivo un periodo corto, luego muero y todo será para nada. Todas mis preocupaciones y anhelos se disolverán "como lágrimas en la lluvia", como decía el cyborg de Blade Runner enfrentado a su propia mortalidad. Todo se me antoja un sinsentido y , aún peor, un absurdo, lo que implica la comprensión profunda del sinsentido.