EL RATÓN
¡Qué bueno! Parece que hable de mí. ¡Me pongo muy nerviosa cuando el ordenador no me hace caso!
EL RATÓN
Javier grita a la pantalla de su ordenador:
—Quiero hacer un dibujo de
El gato con botas y no me sale,
¡no entiendo qué falla!
¡Clic!, ¡clic! ¿Por qué no funciona
ninguna tecla y el ratón no
me hace caso? ¡Lo he intentado
todo!
¡Ordenador, no me falles ahora!
Mira lo que te digo: ¡Si me haces
trampas, hemos acabado!
—A ver, chico, es normal que, si
quieres hacer un dibujo de un
gato, el ratón no te haga caso.