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CUENTO DIVERTIDO

EMILY PARROT

¿Os imagináis a vuestras mascotas usando teléfonos móviles? ¡Esto empieza bien!

 

EMILY PARROT

Ricardo Ruiz Garzón

¿Por qué a la gente le gustará tanto el cotilleo?

Porque si se trata de contar bueno, yo también podría, ¿eh? Mire los juguetes de Espina, esos chismes tecnológicos… Pues yo no lo acabo de entender, qué quiere que le diga. Los alevines sí, porque ellos lo sacan todo de InterPet: que si una suscripción a Netfly, que si tutoriales para pelar pipas, que si los Loros de OT... Yo ya lo veo útil, ya, pero soy mayor, ¿sabe? En mi época no había tanto cacharrito y también nos divertíamos. Un poquitín de modernidad me gusta, pero sin pasarse, ¿no? Que todo tiene un límite, ¡caray!, que hay cotorritas que se están quedando sin uñas de tanto darle a la pantalla... Y mire que se lo advertí a la doctora cuando empezó:

—¿Los trastos esos no serán peligrosillos, Espinita?

—A los humanos les funcionan —me dijo—. Nos ayudarán también a nosotros.

Y dicho y hecho. Y ya ve adónde hemos llegado, que hasta hay peceras con pantalla. Bueno, eso a Ed le va muy bien, para sus chistes, pero... ¡Ay, bueno, no le niego, inspector, que a mí el GPS me ha devuelto a la vida! Llevaba siglos sin volar al aire libre, por miedo a perderme en esta ciudad tan enormísima. Claro, tantos años en la jaula... Me asustaba. Es natural, ¿no? Sin embargo, ahora, pese al reúma, me doy mis vueltitas, de palmera en palmera, y hago excursioncitas, ¡qué delicia! Me pongo mis destinos en el navegador, sigo las instrucciones y... ¡listo! Hasta una guía de viaje me he descargado.

A veces, es verdad, he de salir corriendo para que Alicia no cierre la ventana y me deje fuera de casa, pero qué placer. Es el paraíso, Dios me perdone por decirlo así. Medio enganchadita estoy al GPS, ¡ay! Por eso tuvimos la peleílla con la doctora, ¿sabe? Ella me recetó el cachivache este para distraerme de Alicia, que hacía cosas de cría... Bueno, de granujilla, ¿sabe? De mala pieza. Vamos, de sinvergüenza, porque fue regalarle su padre el juego de química y a mí al verlo me dieron unos sofocos...

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